Mis niños hacen berrinches. 7 tips para establecer límites

Los niños de 1 a 3 años hacen berrinche para poner a prueba los límites de sus papás 

Sabemos que los berrinches, especialmente entre el año y los tres años, son muy comunes. A la mayoría de las mamás les apanican estas crisis emocionales de sus hijos. Y con toda razón, el berrinche de nuestro hijo nos causa mucha frustración, no sabemos cómo manejarlos y perdemos la paciencia.

Esto es normal. Nadie nos enseño a ser papás y ningún niño viene con instructivo.

  1.  Dejar claro lo que está permitido y lo que no 

Primero que nada, les quiero explicar que pasa con los niños en el momento de un berrinche. Como apenas están aprendiendo sobre sus emociones, todavía no tienen el lenguaje para expresarnos como se sienten ni la capacidad para autorregularse, así que la única manera de hacernos saber que sienten algún malestar es haciendo berrinche. Un berrinche lo hacen cuando sienten una emoción displacentera y es la única manera que tienen de expresarnos que nos necesitan.

Lo que tienen que establecer en su casa son límites, dejarle claro qué está permitido y qué no, tanto en la casa como en su comportamiento.

  1. Tener una rutina evita conflictos

Otra de las cosas importantes que pueden hacer para prevenir berrinches es tener una rutina, cuando los niños tienen una rutina conocida, pueden anticipar lo que va a pasar y saben lo que se espera de ellos. Esto evita muchos conflictos. Traten siempre de apegarse a la misma rutina (en la medida de lo posible). 

  1. Nunca lo ignores

Cuando dicen que los niños hacen berrinches para llamar la atención, tienen razón.

 Los niños LLAMAN SU ATENCIÓN porque tienen algún malestar y los necesitan a ustedes para sentirse mejor, por eso patalean, lloran, gritan, pegan y hacen hasta lo imposible para que los peles.

 Nunca lo ignores, ya que lo que necesita tú niño es que le pongas atención. Les prometo que poner atención a un berrinche no es sinónimo de que les va a tomar la medida, solamente le están dando el mensaje que cuando los necesite van a estar ahí para él

  1. No pierdas la calma

 Cuando te enfrentas a un berrinche repite en tu cabeza: NO PERDER LA CALMA. Esto es lo más importante

Si tú te alteras más, la situación empeora.

Permite que el niño sienta la emoción, acuérdate que un berrinche es solamente una emoción que le causa malestar. Hay que evitar frenar la emoción y permitir su descarga. 

  1. Permite que sienta la emoción y acompáñalo

 Estamos muy acostumbrados a pedirle que deje de llorar o a distraerlo. Es muy sano permitir que sienta la emoción y solamente acompañarlo. 

  1. Nunca castigues ni condiciones su relación.

Durante el berrinche siempre tenemos que seguir emocionalmente conectados con los niños. En los momentos que “peor” se portan es cuando más nos necesitan ahí, alado de ellos. Así que quédate cerca y cuando termine de hacer el berrinche apapáchalo y consuélalo. En estos momentos es donde se forma el apego seguro y se fortalece el vínculo afectivo entre ustedes dos. Nunca castigues ni condiciones su relación. 

  1. Una vez que la crisis pasó, reflexiona junto con tú niño

Cuando se haya tranquilizado, reflexiona junto con él lo que paso. Es en estos momentos en donde les enseñamos sobre empatía, perdón, pensar antes de actuar y en las consecuencias de sus actos.

Acuérdate de siempre tener claros los límites que no cumplió y explícale porque son importantes. Trata de no hacerlo sentir culpable ni avergonzado por lo que hizo.

Es importante siempre tener en mente que los niños no quieren hacer berrinches ni se quieren sentir fuera de control. Depende de nosotros enseñarles cómo pueden manejar estas emociones fuertes que sienten. 

Para más información >> Instagram de @michelleazizk